Value investing – Lo que has de saber

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Hacer negocios y tener éxito, es una verdadera lotería, ¿por qué lo decimos? Porque una persona pudiera ver el potencial de cierto negocio, arriesgarse a invertir en él, obtener algunas ganancias y, sin embargo, con el paso del tiempo, venirse a pique.

Claro, esto no quiere decir que siempre sucederá de la misma manera. De hecho, en la actualidad, se cuenta con diferentes estrategias que ayudan a determinar cuán rentable puede llegar a ser una inversión.

Esto se hace porque nadie quiere arriesgar su dinero. Si se toma la decisión de dar un paso tan importante, es porque se tiene la seguridad de que será un paso firme. No obstante, los imprevistos están a la orden del día y, lo que parece ser muy sólido, con el tiempo podría llegar a desplomarse en un abrir y cerrar de ojos.

Por supuesto, quienes corren más riesgo en este sentido son los inexpertos o los principiantes. Por lo general, suelen carecer de la visión que se necesita para dar en el blanco, son más emocionales y, por lo tanto, toman decisiones precipitadas, de las que luego se arrepienten.

Pero, ¿qué hacer para que las cosas vayan sobre ruedas y poder apostar para ganar? Una estrategia que está en boga, en el mundo empresarial, es el Value investing, ¿habías escuchado hablar sobre este término? ¡Probablemente no! Sin embargo, ha sido la solución para el problema de muchos.

Pero, ¿de qué se trata? ¿Cuáles son los beneficios que ofrece? ¿Cuáles son sus desventajas? ¿Cómo puedes implementarlo? En este artículo te estaremos ayudando a responder estas, y otras interrogantes, relacionadas con el mundo empresarial.

Así que, si te interesa indagar en este tema, no puedes dejar de leer este interesante artículo. De seguro no te arrepentirás. Veámoslo.

El Value investing

Value investing

Muchos de los problemas, a la hora de realizar una inversión, son producto del desconocimiento. Sí, por lo general, la persona con deseo de emprender, pero desconocedora del tema, confía en cualquier orientación que se le dé, sin saber si esta se apega a la realidad o no.

Es por ese motivo que muchos terminan siendo estafados y pierden los ahorros de toda una vida. No obstante, eso no tiene que sucedernos a nosotros. Por ello, el primer paso que debemos dar es empaparnos del tema, es decir, adquirir la mayor cantidad de información para que no nos metan gato por liebre. De esa manera sabremos con certeza en qué nos estamos metiendo.

Ahora bien, el término inglés Value investing significa Inversión en valor y consiste en el aprovechamiento de los cambios, a corto plazo, del precio de las acciones de una empresa, para invertir en ellas a largo plazo.

Se basa en adquirir valores que se encuentren por debajo de lo que se define como valor intrínseco, o sea, el valor real de la empresa. El mismo que ofrecería un comprador, que tenga conocimiento, por el 100% de una compañía que se encuentra bajo negociación de igual a igual.

En otras palabras, el Value investing se encarga de buscar y aprovechar las mejores ofertas del mercado. Lo mismo que haríamos cuando vamos al centro comercial o al supermercado para hacer compras, buscar los mejores precios, los más rentables.

Esta estrategia ha sido de mucha utilidad para los inversionistas más importantes del mundo empresarial. Si a ellos les ha resultado, ¿por qué debemos esperar un resultado contrario?

Los precios más atractivos, de una empresa, son los que se encuentran por debajo de su valor intrínseco. A esta diferencia de valor se le conoce con el nombre de Margen de seguridad. Es decir, se trata de la garantía de que estás haciendo bien las cosas. El respaldo a tu capital, por si ocurre algún imprevisto en la negociación.

Claro, adquirir compañías a bajo costo podría representar un gran riesgo, ya que nadie quiere vender para perder. Alguien podría pensar que el precio es demasiado bueno como para ser cierto, y es verdad.

Sin embargo, en ocasiones, se pueden encontrar compañías buenas a un precio muy bajo, ¿por qué? Por diferentes motivos.

Value investing

Uno de ellos puede ser los negocios cíclicos, dueños impacientes, que se trate de una empresa pequeña, el factor de la liquidez, tal vez se trata de alguna empresa familiar o de empresas del tipo holding, es decir, de las que buscan poseer las acciones de otras para tener pleno control, o tal vez tengan un buen precio por razones de ubicación geográfica.

Lo cierto es que, en cualquiera de los casos, se trata de una oportunidad que no se puede desaprovechar. Pero, para estar seguros de la decisión que se va a tomar, es importante asegurarse bien de la situación en la que se encuentra la compañía.

En el caso específico de España, una de las primeras gestoras, que siguió los principios de Value investing y que obtuvo una rentabilidad considerable, incluso por encima de su índice de referencia, fue Bestinver. Sin embargo, en los últimos años, se han estado añadiendo otras empresas como Metagestion, AzValor y Amiral Gestion, entre otras empresas importantes.

Ahora bien, sabiendo todo esto y conociendo antecedentes de empresas que se han convertido en grandes gestoras Value, es probable que también desees incursionar en esta área. Pero, ¿qué más necesitas saber sobre este tema? Lo estaremos viendo en el siguiente subtítulo, por lo que te recomendamos que sigas leyendo.

Tipos de personas según el Value investing

Value investing

Para los grandes inversionistas que apoyan el Value investing, el valor es lo que se obtiene cuando compras algo. Como, por ejemplo, los activos de una empresa.

Ahora bien, en cuanto al precio, este es considerado como solo una opinión marginal, ¿por qué? Es una opinión porque, para ellos, se trata de la manera de pensar de una persona o de una organización, y es marginal porque se refiere solamente al último intercambio que se realizó.

De este punto de vista podemos extraer lo siguiente: el valor no lo determina el precio de lo que se obtiene, más bien se trata del bien en sí, es decir, de su potencial.

De acuerdo con esta idea, el Value investing establece dos tipos de personas. La primera de ellas es el inversor, el cual se encarga de comprar aquello que conoce, sin necesidad de intentar predecir el futuro.

Esto se debe a que es muy incierto tratar de pronosticar el precio financiero de algo si el futuro es muy lejano. En estos casos, los riesgos suelen ser mayores y es donde más pérdidas se dan.

En un mercado participan diferentes tipos de agentes, y son ellos los que hacen mover el precio. Por lo tanto, el futuro se vuelve muy incierto, difícil de presagiar.

Por otra parte, está el especulador. Esta persona es todo lo contrario al inversor, es decir, trata por todos los medios de ver el potencial de crecimiento de un producto. Se esfuerza por predecir el futuro.

Esto lo hace sin tener alguna justificación lógica, solo por el simple hecho de revalorizar el activo que ha adquirido. En realidad, solo puede creer que conoce algo, pero no tiene ni la certeza ni la seguridad de que así sucederá.

Por otra parte, también hay dos tipos de análisis que la persona puede realizar con relación a un activo. Uno de ellos es el cuantitativo, el cual engloba todos los análisis, que sean de índole contable, que se llevan a cabo en una empresa.

Por ejemplo, la valoración contable de líquidos, de activos, de descuento de flujos de efectivo, etc. La diferencia entre estos está relacionada con la incertidumbre. En el caso de las valoraciones de los activos a precio de liquidación, estos pueden llevar a variar, de manera considerable, en el precio que el mercado paga finalmente por ellos.

Sin embargo, el margen de error suele ser menor que en otros casos, como en el de un descuento de flujos de efectivo.

También está el análisis cualitativo, el cual trata de evaluar los bienes de una empresa que son de índole intangibles. Es decir, aquellos que no son posibles de cuantificar de manera directa. En este punto se encuentran las ventajas competitivas que le dan la oportunidad a las empresas de recuperar su capital con altos índices de rentabilidad. Esta es considerada la parte menos importante del Value investing, ya que es difícil de determinar.

De modo que podríamos resumir las ideas anteriores de la siguiente manera: la persona será una inversora si compra por debajo del valor intrínseco, pero será un especulador si lo hace por encima o, incluso, al mismo precio.

Ahora bien, dentro del Value investing existe un término muy importante que necesitas poder manejar perfectamente, se trata del margen de seguridad. Para que esto pueda darse, el inversor deberá comprar alguna acción que esté muy por debajo del valor calculado, ¿con qué propósito? Para que este pueda proporcionar un margen de error que cubra cualquier tipo de error a la hora de realizar el análisis.

Por ejemplo, en el caso de que una acción cueste unos 150$, y nuestra valoración concuerda con ello, si nos equivocamos en lo más mínimo, podríamos terminar comprando algo que en realidad sea caro.

Por el contrario, si el precio es de 100$ o de 80$ y nuestra valoración termina siendo menor, aún tendremos la posibilidad de obtener algún tipo de ganancia o, al menos, de no salir perdiendo, que es lo mínimo que se quiere.

Puede que, hasta ahora, pienses que sabes todo lo necesario relacionado con el Value investing. Pero, ¿qué consejos debes tomar en cuenta a la hora de decidir?

Más consejos

Value investing

Además de todo lo anteriormente dicho, es importante que sepas que existen al menos 3 tipos de sub estilos, en cuanto a la inversión de valor se refiere:

  1. La alta rentabilidad por dividendo. Esta espera que los altos dividendos puedan mantenerse en el futuro. De esta manera ofrecerán una buena rentabilidad a la inversión realizada.
  2. Los múltiplos de precios bajos. Esta se enfoca en esperar que la economía sea la encargada de mejorar las acciones que tienen ratios Es decir, que aumenten en valor. Para esto, se centran en aquellas empresas con ratios bajos de valoración.
  3. La inversión contraria. Con esta se apuestan por aquellos bienes, que se creen que están poco valorados, por el mercado.

Si deseas incursionar en este campo de trabajo, es importante que tomes en cuenta que un inversor Value se encarga de buscar empresas con ventajas competitivas que sean duraderas y, por tanto, estables. Así que la inversión resulta a ser a largo plazo, ya que es el tiempo el que se encargará de ajustar el precio del bien adquirido con su valor intrínseco, es decir, su valor real.

Esto puede sonar muy fácil de realizar. Sin embargo, se trata de todo un arte. Por lo que es necesario que desarrolles las habilidades competitivas que se requieren, entre ellas, un ojo discernidor y la capacidad de análisis. De esta manera, tendrás la mitad del camino recorrido. La otra mitad dependerá de cuán acertada fue la predicción que hiciste.

Es cierto que la mayoría de las cosas, en el mundo empresarial, están determinadas por la casualidad. Pero, si te tomas las cosas en serio, eso puede marcar la diferencia y reportar verdaderos beneficios para ti, y para tu familia, a largo plazo. Piensa bien y acierta.

 

 

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