¿Qué son Principios de Contabilidad Generalmente Aceptados?
¿Eres un trabajador autónomo, tienes una empresa o estás comercializando tu marca, pero no sabes exactamente tus derechos y obligaciones? ¿Quieres desarrollar una seña de identidad fiel y con unos buenos cimientos éticos que te permitan ser reconocido y valorado? En este artículo hablaremos de qué son los principios de contabilidad generalmente aceptado y de todo lo que deberías saber. El PCGA (Principios Contables Generalmente Aceptados) o también conocido como NIF (Normas referente a información financiera) son una serie de normas genéricas que guían de manera contable, con el fin de que un ente formule criterios respecto a medición patrimonial e información correspondiente a elementos económicos y patrimoniales.
Los principios contables son totalmente necesarios y efectivos para cumplir con nuestra responsabilidad financiera. También reconocer la importancia del balance de situación en tu contabilidad y saber cómo puede un emprendedor llevar su contabilidad. Para ello, es importante contar con la ayuda profesional de un asesor. Con esta contratación, no solamente tenemos una economía perfectamente ordenada y separada. Si lo vemos como dos diferentes finanzas, la personal y la empresarial, podemos establecer una organización más efectiva y objetiva. Con la ayuda del asesor o gestor iremos adquiriendo, de manera inconscientes en muchas ocasiones, una formación específica. Con cada situación, podemos identificar el problema y la solución correcta para resolver de la mejor manera.
Principios de Contabilidad Generalmente Aceptados
Los NIF o PCGA recogen los parámetros que sirven para confeccionar un estado financiero sobre cierta base metódica uniforme para una técnica contable.
Dichos principios contables generalmente aceptados fueron aprobados en 1.965. Aprovechando una conferencia de contabilidad celebrada en la ciudad argentina Mar de Plata. Sin embargo, un principio contable ya establecido como el conocido «partida doble» tuvo su creación en el año 1.494 y dicho enunciado reza así:
- Una cuenta deudora o más han de corresponder en todo caso a una cuenta acreedora o más. Además, han de mantener el mismo importe.
- El resultado de las sumas obtenidas en el haber han de ser el mismo en el debe.
- Las ganancias son acreditadas y las pérdidas se debitarán.
- Se diferencia el patrimonio de los propietarios con el de la empresa o ente.
- Los recursos de ese mismo ente y su principio tiene un igual valor respecto a esas participaciones recaídas sobre él.
- Las causas obtenidas de los resultados y componentes patrimoniales son presentados mediante una cuenta. En dicha cuenta son registradas las notas o asentadas las variaciones con el concepto representado.
- El saldo perteneciente a una cuenta y el valor monetario es lo mismo, en un determinado momento. El saldo será modificado cuando alguna operación tenga efecto en los componentes a los que representa.
- Las cuentas de gasto y activo siempre van a ser deudoras. En cambio, el pasivo será ganancia y las acreedoras son patrimonio neto.
- Cada anotación, llamado asiento, al margen del número de crédito o débito, ha de tener una suma del total de los saldos igual y exacta.
Como podemos ver, este sistema creado hace más de 500 años, es parte de los PCGA actualmente. Parece sumamente increíble que se haya dado con un sistema tan exacto a una época tan temprana.
Información empresarial y personal
La pertinente información financiera es registrada y posteriormente informada de manera separada, respecto a los datos personales de la persona dueña del negocio. Esta persona puede perfectamente tener una casa y coche, además de su propio negocio. Aun así, dichos registros financieros correspondientes al negocio se han de mantener al margen de los datos o propiedades del dueño. Nunca se mezclarán esos registros financieros de cada uno de esos campos. Por este motivo, se utiliza para cada uso (empresarial y personal) una cuenta bancaria. El negocio es como si fuera otra persona, independiente del dueño.
El empresario tiene la figura de acreedor respecto a las empresas creadas por él. Al margen de la cantidad de empresas que pueda llegar a constituir, cada una de ellas es una entidad. La forma en la que se representa es mediante una cuenta capital. Esta es una de claves para tener una buena organización.
La equidad en la contabilidad
Su equidad es definida en un campo de contabilidad mediante justicia natural. Es ese marco en el que actúa y donde no hay ninguna norma establecida por derecho positivo. Este es un principio fundamental, con el fin de orientar para la acción de un profesional contable a cada momento y se cita de la siguiente manera:
Cuando existen intereses opuestos en contabilidad, la equidad ha de convertirse en un objetivo constante. De esta manera, aquellas personas que usan esos datos de contabilidad, no se encuentren ninguna situación en la que dichos intereses estén en un conflicto. Por ello, el estado financiero se ha de preparar para que refleje, equitativamente, los diferentes intereses que están en juego en esa empresa.
Los principios otorgados mediante el medio socioeconómico son varios. A continuación, hablaremos en detalle de todos y cada uno de ellos.
– El ente. Cuando una entidad identificable realiza una actividad económica, son constituidas por una combinación de recursos naturales, de capital y humanos. Respecto a su coordinación, el responsable es la autoridad encargada de tomar decisiones orientadas a un logro de objetivos para la entidad.
En su contabilidad, le conviene identificar la persecución por parte de la entidad cualquier fin económico particular. Estos serán independientes respecto a otras entidades. Los criterios para identificar a la entidad son los siguiente:
El conjunto de los recursos destinados a la satisfacción de una necesidad social capacitada de estructura y operación propia.
El centro que gestiona cada decisión independiente, relacionada con un objetivo para un fin específico. En otras palabras, saciar una necesidad de ámbito social.
Consecuentemente, un negocio y su personalidad es totalmente independiente respecto a propietarios o accionistas. En los estados financieros de dicho negocio únicamente se incluirán los valores, obligaciones, derechos y bienes que le pertenezcan. Es posible que la entidad sea la persona física o, en cambio, una mezcla de varias.
Más principios
– El bien económico. El estado contable siempre hace referencia al bien económico. Dicho de otra forma, los bienes inmateriales y materiales poseedores de valor económico y con susceptibilidad de valuación monetaria. Conocidos también con por los nombres de bienes ajenos o bienes propios.
– La unidad para medida. Con el fin de reflejar un patrimonio de la empresa en un estado contable, se elige una moneda. Además, se valoriza todo elemento patrimonial, aplicando un costo por unidad. En general, se utiliza la moneda con curso legal en ese país en el que la empresa está funcionando.
– Marcha de la empresa. Al no notificarse la desaparición de la empresa, sus cifras de estado financiero representan un valor histórico o sus modificaciones, obtenidos de manera sistemática.
En el momento en el que el valor estimado de liquidación se represente por las cifras, se especificará de una manera clara. Sólo se aceptarán con el objetivo de obtener una información genérica cuando esa entidad pase por un período de liquidación. Dicho principio apunta cuando el evento u operación se deba registrar en su contabilidad o no.
– La marcha de la empresa o la continuación de operaciones. A no ser que se indique expresamente, se sobreentiende que el estado contable pertenece a la empresa que se encuentra en marcha. Se considerará que el concepto informado hace referencia a los organismos económicos en los que su existencia temporal goza de total vigencia y futura proyección.
Últimos principios
– Período de tiempo. Cuando una empresa tiene la obligación de hacer una medición del resultado respecto a la gestión. Esto pasa eventualmente, atendiendo a razones legales, administrativas, financieras o fiscales. Este lapso de tiempo en el que se hace este trámite recibe el nombre de período. Dicha etapa suele englobar doce meses y se le llama ejercicio. También es conocido como ejercicio económico,período contable o ejercicio contable.
El estudio que implica a un estado contable se supeditará a un corto período fiscal. Gracias a ello, tendremos una visión mejor respecto a la empresa y poder así tomar ciertas decisiones desde la consciencia plena. Lo normal es que, si todo va bien, la empresa dure muchos años. Para conocer un resultado definitivo correspondiente a una inversión, normalmente se espera hasta que la empresa termine la actividad. Aun así, parece poco lógico que se tenga que esperar al cierre de una actividad para saber los resultados de una institución.
– Principio para el periodo contable. Es cuando se necesita conocer un resultado de operaciones y de una situación financiera con existencia continua. Esto provoca la división de la vida, representados en distintos períodos convencionales.
Los eventos y operaciones, como los efectos derivados, que se puedan cuantificar, se identifican con su período. Esto significa que toda información de contabilidad indicará de una manera transparente el período al que hace referencia. Otra opción es no añadir ninguna operación que no se corresponda con el período o ejercicio.
Por lo general, los gastos y costos se identificarán con un ingreso que han originado. Al margen de su fecha de pago. Toda operación realizada, se registrará en su momento.