Empresa – ¿Qué es una empresa?
Hola de nuevo. En esta ocasión tenéis ante vosotros un nuevo artículo que trata de definir uno de los conceptos básicos de la economía. El concepto de empresa.
Todos nosotros nos hacemos una idea aproximada de lo que una empresa significa. A todos nos resulta familiar el concepto de empresa. Lo oímos en los telediarios, trabajamos en ellas, incluso podemos tener una.
Pero la literatura académica al respecto es mucho mas precisa definiendo conceptos que cualquier definición coloquial. Ha habido mucho trabajo de investigación detrás de lo que se refiere el concepto de empresa. Y hay todo un estudio del origen de la palabra empresa y empresario.
Así pues, aunque la idea de empresa es común su definición adecuada no suele conocerse con exactitud. Pero para eso en este artículo veremos la definición correcta de empresa. El origen del término. Y la clasificación según los tipos de empresa.
Empresa – ¿Qué es una empresa?
Una empresa es la organización de factores de producción para la consecución de un fin. Es una figura propia del capitalismo Por tanto podemos identificar una serie de puntos comunes a todas las empresas que vamos a analizar en profundidad a continuación.
Debe haber factores de producción utilizados para considerarse empresa. Los factores de producción son las unidades básicas que se encargan de producir aquello a lo que se dedique la empresa, ya sean bienes o servicios.
Los economistas clásicos identificaron 3 factores de producción. La tierra, el trabajo y el capital. Hoy día esta definición se sigue usando. Como puedes ver por factores de producción no solo se refiere a maquinaria. Las personas, es decir, los trabajadores, también son medios de producción. Veamos.
Una empresa requiere de 3 factores productivos
Factor trabajo, este factor hace alusión a los trabajadores ya sea por cuenta ajena o propia (que serían los propios empresarios)-
Factor tierra, este factor hace referencia como su nombre indica al lugar en el que se ubique la empresa. Su base de operaciones, como puede ser una fábrica o una oficina.
Y por último tenemos el factor capital. Este factor de producción por eliminación lo podemos identificar como aquel medio para producir que no es factor trabajo ni factor tierra. Pero de manera mas concreta lo podemos definir como el factor de producción que necesita ser producido y que este a su vez es necesario para producir bienes de consumo.
Es decir, no es un factor finalista, aunque necesita ser producido su misión no es satisfacer necesidades humanas, sino producir bienes que supondrán la satisfacción de una necesidad.
Luego identificamos otro aspecto que forma parte de la definición de toda empresa y no es otro que el objetivo.
Una empresa tiene una misión
Por objetivo podemos entender la misión de la empresa y por la cual la empresa se ha fundado. Todas las empresas tienen el objetivo común de obtener beneficios y de perpetuarse lo mas posible en el tiempo. Pero no todas comparten el mismo objetivo. Este objetivo, que de ahora en adelante me referiré a el como objeto social para ser mas preciso, varía de una empresa a otra.
El objeto social de una empresa defina que tipo de empresa va ser. Por ejemplo, un banco, como el Banco Santander, tiene por objeto social el siguiente.
- La realización de actividades propias de la banca tradicional.
- La obtención y venta de valores mobiliarios.
Con esto el Banco Santander ya nos está diciendo a que se dedica y que tipo de empresa es. Es un banco comercial que puede tener actividad inversora
Por último como punto en común de todas las empresas está la organización. Se entiende que todas las empresas deben tener algún tipo de dirección detrás, alguna persona encargada de la organización. Esto es un requisito indispensable incluso cuando se traten de empresas que son propiedad de otras empresas.
Por eso, en la legislación mercantil de casi todos los países modernos, se exige que exista al menos una persona como administradora de la empresa.
El concepto de empresa fue definido por los economistas clásicos
Esta definición es la que se dio en el siglo XIX al concepto de empresa. Puede parecer anticuada a simple vista pero lo cierto es que hoy día aún sigue definiendo bien lo que es una empresa y consigue adaptarse a los nuevos tipos de organizaciones que hay en la actualidad.
Por ejemplo pensemos en un consultor informático. Este consultor tiene una empresa propia de consultoría y se dedica a dar servicios informáticos a otras empresas. En esta empresa podemos identificar todos los factores necesarios para tener una empresa.
- Una organización, el propio empresario administra y dirige su empresa.
- Factores de producción, el factor trabajo sería el empresario mismo como trabajador. El factor tierra sería el lugar en el que trabaje, podría ser su domicilio. Y el factor capital englobaría todos los medios que utilice para producir su servicio; ordenadores, programas de software, instrumentos y herramientas… también habría que incluir aquí los conocimientos, por ejemplo la preparación como informático constituye un factor de capital.
- Objeto social. La prestación de servicios en asistencia técnica informática.
Tipos de empresa
Hay muchas formas de clasificar a las empresas, por tamaño, por su nivel de competitividad…
Comenzaremos esta clasificación utilizando el criterio jurídico. Es decir la clasificación de las empresas en función de su forma jurídica.
Clasificación por la forma jurídica
En la legislación occidental hay dos diferenciaciones básicas entre las empresas por su forma jurídica. Esta diferenciación es por la responsabilidad de los socios frente a la empresa. Y por la necesidad de aportar un capital mínimo para fundar la organización.
La responsabilidad puede estar limitada al capital aportado en un caso, y en otro el empresario responde con todo su capital personal de las deudas de la empresa
Hay empresas de responsabilidad limitada y sin límite de responsabilidad.
Comenzaremos con los tipos de empresa que no limitan la responsabilidad. En este caso tenemos:
- Sociedad comanditaria por acciones: Responsabilidad total de los socios. Capital mínimo de 60.000 euros.
- Sociedad comanditaria simple: los socios responden de las deudas con todo su patrimonio. No tiene capital mínimo.
- Empresario individual: en este caso sería el conocido como autónomo. En teoría no precia de aportación mínima de capital pero si tiene un impuesto fijo, la cuota de autónomos.
- Sociedad colectiva: responsabilidad total de los partícipes en la sociedad. No hay capital mínimo.
- Emprendedor de responsabilidad limitada: al contrario de lo que indica su nombre el empresario si responde con su patrimonio aunque hasta ciertos límites.
- Agrupación de interés económico: responsabilidad total. No hay capital mínimo,
Estas son las principales sociedades que tienen una responsabilidad total frente a deudas. Veamos ahora a las sociedades de responsabilidad limitada:
- Sociedad de responsabilidad limitada: como su nombre indica la responsabilidad frente a deudas está limitada al capital aportado. Requiere de un capital mínimo de 3001 euros.
- Sociedad anónima: Igualmente con responsabilidad limitada. Requiere de un capital mínimo de 60.000 euros.
- Sociedad de responsabilidad limitada laboral: mismas condiciones que la sociedad limitada.
- Fondo de capital riesgo: responsabilidad limitada. Requiere de un capital mínimo para ser fundada de 1.650.000 euros.
- Sociedad de capital riesgo. Sin responsabilidad aparte del capital invertido. Requiere de un capital mínimo para su fundación de 1.200.000 euros.
- Sociedad cooperativa: responsabilidad solo al capital aportado. Requiere de cantidad mínima para fundarse solo si así se exige en sus propios estatutos de fundación.
Aquí se han analizado a las empresas por las principales formas jurídicas que pueden tomar.
Clasificación en función del tamaño
Otra de las grandes clasificaciones que se hace a las empresas es en función del tamaño de las mismas.
Las empresas pueden ser; microempresas, PYMES, y grandes empresas. Esta clasificación se basa en dos criterios. El número de trabajadores y el volumen de negocio de la sociedad. Con que uno de los criterios ya sea cumplido ya es suficiente para clasificar a la empresa dentro de una categoría u otra.
Clasificación en función del número de trabajadores
Microempresas. Estas empresas tienen menos de 10 trabajadores, suelen ser pequeños proyectos que están empezando o empresas que por su naturaleza no dan para mas trabajadores contratados.
Pequeñas empresas. Empresas que tienen entre 10 y 50 trabajadores.
Empresas medianas. Aquellas que tienen entre 50 y 250 trabajadores contratados.
Grandes empresas. Las empresas que disponen de mas de 250 trabajadores.
Clasificación en función del volumen de negocio
El volumen de negocio es la cifra que refleja los ingresos obtenidos por la actividad comercial habitual de la empresa.
Microempresas. Tienen un volumen de negocio menor a 2.000.000 de euros.
Pequeña empresa. Un volumen de negocio menor a 10.000.000 de euros.
Empresa mediana. Con un volumen de negocio inferior a 43.000.000 de euros.
Gran empresa. Aquella que su volumen de negocio supera los 43.000.000 de euros.
Clasificación en función al sector económico
En función de a que sector económico pertenece la empresa se le puede clasificar dentro de uno de ellos.
Los sectores básicos de la economía son el sector primario, el secundario y terciario.
Las empresas que pertenecen al sector primario son las encargadas de la extracción de recursos naturales, a la ganadería y agricultura. Y en general a la extracción y producción de materiales no producidos.
Las empresas del sector secundario se encargan de transformar los materiales del sector primario en productos elaborados con mayor valor añadido. Este sector se suele asociar con el sector industrial o de transformación.
Las empresas del sector terciario son las encargadas de la prestación de servicios, ya sea a otras empresas o a consumidores finales.
Clasificación de las empresas en función de su localización
Esta es bastante sencilla y simple. No es mas que clasificar una empresa en función de la amplitud territorial de su actividad económica.
Podemos encontrar empresas desde regionales a grandes multinacionales. Pero a la hora de la verdad solo se suele hablar de empresas o bien nacionales, o bien internacionales.
Empresas en función de la titularidad del capital
Esta clasificación es muy importante y es la que se realiza en función de quien es el propietario real de la sociedad.
Podemos distinguir 3 tipos de empresas distintos.
- Empresas públicas.
- Empresas privadas.
- Empresas mixtas.
En las empresas públicas la titularidad del capital es del estado o de alguna institución pública como pudiera ser una Comunidad Autónoma. Estas empresas son creadas mediante leyes y fijan sus estatutos también mediante legislación. Dependiendo del país dependerá el número de empresas públicas en la economía. Llegando a existir países que solamente tienen empresas públicas como Cuba, y otros que apenas tienen como Singapur.
Empresas privadas. Los propietarios titulares del capital social de la empresa son otros particulares ajenos a la administración. Es la forma de empresa mas abundante en España.
Empresa mixta. En las empresas mixtas la titularidad del capital social está dividida entre el sector privado y público. Estas empresas suelen existir cuando una empresa pública se liberaliza, o bien en algún tipo de colaboración entre el sector privado y la administración. Son poco comunes en la economía y su duración como empresa mixta suele ser temporal.