Las empresas silo – Lo que has de saber
Las denominadas empresas silo son aquellas empresas que crean diferentes áreas y unidades de negocio, las cuales, en conjunto, constituyen la misma. Su existencia es positiva siempre que se mantenga una buena coordinación y el flujo de comunicación existente sea el apropiado. En caso contrario pueden producirse problemas a nivel interno.
Según diferentes especialistas, en las empresas silo son la consecuencia de una excesiva y poco equilibrada visión vertical de la misma. Este efecto hace que las cuestiones interdepartamentales no se puedan resolver en niveles medios o bajos, por lo que cualquier problema de esta índole debe ser elevada a los puestos más altos del silo para poder resolverlos por parte de los directores.
Esto lo que hace es que sea necesario un extra de control, lo que hace que haya un incremento de costes en la coordinación de la empresa, además de una menor eficacia y rapidez a la hora de hacer frente a las diferentes circunstancias y situaciones que pueden llegar a darse en una empresa. Por este motivo, las empresas silo pueden llegar a ser consideradas un problema, o al menos poco recomendables.
Otro de los riesgos asociados al efecto silo que puede vivir una empresa es lo que se conoce como tribalismo corporativo. Esto se produce cuando algunos de los miembros de un grupo se identifican como su propia unidad individual, dejando a un lado a otros grupos, a los que incluso ven como enemigos y competidores. En lugar de ver al resto de grupo como compañeros en busca de los mismos objetivos, se les ve como rivales y obstáculos, lo que se convierte en un problema adicional para la organización.
No siempre es negativa
Aunque en muchos casos no se recomienda por parte de los expertos, las empresas silo no son siempre negativas. De hecho, la presencia de silos es habitual en las empresas. No obstante, para que sean positivos es necesario que exista una gran cooperación entre los grupos. Deben crearse sinergias y asignar determinados recursos a los diferentes silos.
Por lo tanto, lo que se trata es de crear una estructura que haga que todos los silos estén conectados entre sí. Estos deben trabajar de forma conjunta entre ellos y que exista una comunicación fluida. De hecho la comunicación es clave para poder llegar a alcanzar los mejores resultados posibles.
Los problemas en las empresas silo
La principal causa de que haya problemas en las empresas silo es el miedo que sufren los empleados. Entre estos miedos se encuentran:
- Aquellas persona que temen ser cuestionadas en sus puestos de trabajo, lo que hace que desarrollen un instinto de protección de su zona de trabajo.
- Personas que no quieren ser humilladas y dejan sus pensamientos ocultos para otros.
- Aquellas personas que tienen miedo a hacer algo mal, por lo que las ideas innovadoras que puedan tener prefieren no contarlas.
- Personas que tienen miedo a no ser tenidas en cuenta y que se atribuyen las ideas y méritos de otros.
Entre los síntomas que pueden llevar a pensar que hay problemas en una empresa silo se encuentran, por ejemplo, la falta de cooperación. También que exista gran competencia entre las diferente unidades.
Clasificación de los silos
Existen diferentes tipos de silos que pueden formar parte de las empresas y que son los siguientes:
- Producto: Son unidades que están definidas por un producto o servicio.
- Mercado: Son aquellas que están definidas por las fronteras de los mercados o los sectores.
- Clientes: Están definidos por la segmentación de los difeerntes tipos de clientes de una empresa.
- Funcionales: Son las que se definen por departamentos o agrupaciones dentro de una empresa.
- Geográficos: Son aquellos que se comportan de una manera territorial en determinados países o lugares.
Silos sanos y disfuncionales
Para finalizar, pero no por ello menos importante, hay que tener en cuenta que existe una distinción entre los considerados silos sanos y los silos disfuncionales.
Un silo sano es aquel que satisface de una manera eficiente y controlada las demandas de los diferentes procesos de negocio y operaciones que debe llevar a cabo dentro de una organización. Además colabora de forma correcta con el resto de unidades y silos. También mantiene una gran comunicación con el resto y trabaja con el único objetivo de mejorar el rendimiento de la empresa.
En este tipo de silo no existen competencias irracionales con otros grupos dentro de la empresa. A estos se les ve como unidades de apoyo y fortalecimiento y no como rivales.
Por su parte, los silos disfuncionales son todo lo contrario. En este caso los trabajadores que lo integran desarrollan patologías y comportamientos inadecuados. Por algún tipo de razón, no se comunican de la manera correcta con el resto de departamentos. No trabajan de una manera efectiva y hacen que la empresa funcione de forma más lenta. Tampoco transmiten sus avances al resto de la organización.
En función de si los silos son positivos o negativos se debe valorar su viabilidad. Si una empresa es consciente de que no funcionan de la manera adecuada, deben eliminarse o bien reemplazarse por otros. El objetivo de los silos debe ser el trabajo en grupo y que no haya posturas contrarias e ineficientes dentro de la misma organización.