Ejercicio contable – ¿Qué es el ejercicio contable?

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¿Eres un empresario o trabajas como autónomo y tienes alguna duda sobre cómo llevar tu contabilidad al día y actualizada? ¿No sabes exactamente la legislación o normativa vigente que afecta a tus finanzas y a la manera en que declara? Seguramente este artículo sea de gran interés para ti, ya que aquí hablaremos de qué es exactamente el ejercicio contable. Para empezar a comprender la importancia y el impacto del ejercicio contable en nuestra actividad, primero hemos de saber de qué trata. Dicho ejercicio hace referencia a un período de tiempo que vale para medir una determinada situación financiera y económica de la organización. Otra utilidad que se le encuentra es que nos indica un plazo temporal que comprende dos sucesivos balances anuales. Por eso, de algún modo, se le considera como un período contable donde la empresa y su vida laboral tienen su estructura. Normalmente, se encarga el asesor.

No nos cansamos de comentar y recomendar los programas de contabilidad que tenemos disponibles, sin importar el tipo de negocio. Tengamos o no un asesor, esta herramienta informática elevará la calidad y el nivel de nuestra empresa. Tanto de puertas para afuera como en funcionamiento interno, experimentaremos una gran mejora. Cada trámite, cada operación o petición de un cliente o Hacienda se realiza en cuestión de segundos. Tener un programa o software intuitivo en el que podamos operar, sin importar el lugar en el que estemos no tiene precio. El dinero, que es con lo que obtenemos esta ventaja, es únicamente nuestro tiempo invertido en forma de moneda. Si lo invertimos en una opción que directamente nos proporciona más tiempo, estaremos ganando más dinero. Por eso, no hemos de afrontar este pensamiento como un gasto que deteriora nuestra economía. Todo lo contrario, ya que nos hará la vida mucho mejor.

ejercicio contable

El ejercicio contable

Lo más común es que los resultados obtenidos de dicho ejercicio contable se encuentren divididos por ciclos anuales. Este lapso de tiempo coincide muchas veces con un año natural, no siendo un requisito obligatorio. Por voluntad de la compañía, les resulta más cómodo y sencillo optar por esta manera de hacerlo. Sin embargo, dependiendo de la actividad pueden establecerlo en otras etapas del año. Por ejemplo, algunas compañías relacionadas con venta de material escolar, inician su año contable al terminar el verano. Esto viene motivado por el inicio del curso y el incremento de la actividad en la empresa.

Una fecha para concluir el ejercicio tiene que ver con el punto en cuanto actividad más bajo del año entero correspondiente a la compañía. En términos fiscales es siempre un año, a excepción de que pudiese tratarse de una disolución o constitución de dicho negocio.
Toda actividad que se ejecute en ese ejercicio contable ha de registrarse en unos libros contables que pertenecen a la empresa. El Mayor de Contabilidad o Libro Diario, por ejemplo, hacen más fácil realizar esos balances cuando el ejercicio concluye. Cuando terminen esos balances, las cuentas referentes al anterior año pasan a cerrarse, abriendo camino al inicio del siguiente ejercicio.

La mayor parte de las operaciones que se realizan en cualquier ejercicio contable se clasifican según su fase. Las etapas que podemos diferenciar en este ciclo contable son:

– La apertura. Etapa o fase que comprende el comienzo de una actividad. Aquí, la compañía procede a abrir el ejercicio contable y realiza las pertinentes operaciones o transacciones económicas. Estas se van a encuadran en el libro de contabilidad.
– Los movimientos. En esta parte se registran las diferentes transacciones ejecutadas.
– El cierre. Cuando un periodo de contabilidad concluye, se procede a su cierre con el objetivo de saber el resultado anual de la economía. En esta fase se crea su asiento para el cierre del ejercicio.

Apertura contable

Una apertura de contabilidad, o apertura contable, es la operación que da comienzo a la actividad de nuestra empresa. Puede estar motivada por una constitución de la compañía. En el caso de que la empresa haya estado desarrollando la actividad en anteriores ejercicios, se corresponderá al inicio de su ejercicio económico. Como hemos señalado anteriormente, indica la apertura en los libros contables, o la reapertura si no se trata de su primera vez. Mediante un asiento para su apertura o en el caso de que se cree la empresa; asiento para constitución.

Un asiento para la apertura se forma cuando se carga una cuenta de activo. A su vez, se abonan la cuenta de su patrimonio pasivo y neto. En otras palabras, se reabre toda cuenta que la empresa posee desde el inicio de dicho período. Por ello, ha de confirmar que toda cuenta correctora correspondiente al activo (deterioro y amortización) figuran con el saldo acreedor. Este asiento nos permite proceder al alta en nuestro Libro Mayor y Diario todo elemento referente a partida que cuenta la empresa y la valoración de la misma.

En el momento que la empresa esté creada, dichos elementos van a ser los mismos en comparación a los que terminaron el anterior ejercicio. Así, ambos ejercicios económicos diferentes quedan distanciados. Si se da el caso de que la empresa acaba de constituirse, el asiento para su constitución inicia la contabilidad. Es registrada mediante nuestro Haber, el importe de esas aportaciones para el capital por parte de accionistas o empresarios. Al mismo tiempo, en nuestro Debe tendremos el destino y materialización de ese capital mencionado.

Como hemos podido comprobar, esta operación es lógica y fácil de hacer, una vez hemos entendido el concepto y los pasos a dar. Para ello, necesitaremos unos conocimientos básicos de contabilidad.

Movimiento contable

Existen varios tipos de movimiento que se pueden dar en un ejercicio contable y en la gestión de nuestra contabilidad. A continuación, explicaremos y detallaremos esos dos movimientos posibles.
– Movimiento de crédito. Es la anotación que situamos en la parte izquierda de la cuenta, para el registro de disminuciones y aumentos.
– Movimiento de débito. Hace referencia a la anotación localizadas en la parte derecha de la cuenta en la que se registra una disminución o aumento.

Las disminuciones y aumentos a esas cuentas están motivados por cualquier transacción comercial realizada a diario en el negocio. Pueden ser las ventas, retiros, compras, inversiones, devoluciones, cancelación de deuda, etc. Es importante tener presente que las transacciones comerciales han de provocar un cambio respecto al valor en, mínimo, dos cuentas. El proceso para analizar cualquier transacción comercial es el siguiente:

  1. La determinación de la cuenta afectada.
  2. Clasificación de esa cuenta, dependiendo del grupo.
  3. Establecer si esa cuenta disminuye o aumenta para proceder a su anotación en el correspondiente lado.

Tal y como se puede suponer, la última acción se trata de establecer si nuestra cuenta sufre una disminución o un aumento. El objetivo de ello es escribir esa información en la parte que le corresponde.

 

Cierre contable

Cuando llegamos al fin de nuestro año contable, que normalmente suele coincidir con el año en período natural, se cierra ese ejercicio de contabilidad. En esta época del año podemos ver una alta actividad con la intención de proceder a la corrección de alguna cuenta, fijar una base de impuestos más importantes (sociedades e IVA). Gracias a estas modificaciones o actuaciones, dejamos preparado, de cara al período nuevo. Para ello debemos:

– Realizar la comprobación de toda operación general. Estás han de estar contabilizadas y se ha de pasar a la confección de asientos para ajuste.
– Saldar toda cuenta de gastos e ingresos, con el fin de conocer nuestro resultado final, más las cuentas de ganancias y pérdidas.
– Acabar con ese asiento para el cierre.

Como hemos aconsejado en otros artículos, y en este anteriormente, una aplicación para llevar nuestra contabilidad nos ayudará con esta ardua tarea. En cuestión de pocos minutos podemos crear de manera automática todas estas operaciones, con sus respectivos resultados. Aunque tengamos esta opción disponible, es siempre beneficioso conocer los pasos que se están dando y el motivo de este proceso.

ejercicio contable

Para nuestro asesor también será más cómodo si podemos contar con una herramienta contable. Esta opción, además de las mejoras descritas y señaladas, aumentará la efectividad en comunicación con esta persona. No hará falta desplazarse hasta su despacho, a la espera de coincidir en horarios y que nos pueda atender. O puede que nuestro asesor nos pida un determinado documento en el peor momento del día. Nuestra máxima prioridad es atender a clientes y generar ingresos, por eso con este tipo de operaciones perdemos dinero. Si tenemos la posibilidad de enviarlo en segundos, seremos capaces de no descuidar nuestro negocio.

Para cumplir con nuestra responsabilidad financiera, es importante saber cómo puede un emprendedor llevar su contabilidad y reconocer la importancia del balance de situación en tu contabilidad. Si nuestras aspiraciones económicas o empresariales son altas y queremos seguir prosperando, es aconsejable aumentar nuestra formación en cuestión de economía. Para ello, hemos de rodearnos de expertos en la materia y aprender de esas personas, al mismo tiempo que contratarlos si nuestro negocio así lo requiere. No es obligatorio ser un experto, pero sí que teniendo ciertas nociones podemos decidir de la mejor manera posible.

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